diciembre 27, 2011

Manifiesto

Para estar conmigo necesitas dos cosas:

Entender qué es una mariposa.

diciembre 25, 2011

El día que dejé de recordar


Dejé de verte, de sentir tu presencia, de contemplar tu mirar y caminar. Olvidé las fechas, los nombres y los recuerdos. Dejé de preguntar por todo aquello que carecía de sentido y me fui directo al vino. Me quedé dormido y llamaste. Y no lo recuerdo.

Me dices que hablamos, pero no lo recuerdo. Me dices que te enojaste, pero no sé porqué sería, me dices que es mi culpa, pero lo siento. Ese día dejé de recordar.

Lloraste. Lloramos. Todo se fue al suelo, al otro sitio sin sueño. Gritaste desesperada, como quien destruye un hada. Sola y desamparada, me llamaste tres veces y yo respondí cuatro. ¿Qué tiene que ver la lógica en el canto?

Me mirabas y contemplaste mi frialdad, mi agónica desdicha, mi mundo caer en olfatos baratos. ¿Qué hacías entonces, si no construyendo recuerdos vacíos? Llegué de un salto al parto. Al atavío perdido, al ruiseñor sin razón.

¿Qué tiene que ver la lógica en el canto?
¿La desdicha con el parto?
¿Las hadas despojadas?
¿La razón del ruiseñor?

Pues no, no sé. No quiero saber ni recordar el pretérito pasar.
Ese día lo borré
lo olvidé
lo malogré
lo soslayé
lo evité
lo quemé como a mis demonios.
lo superé

Gracias por no estar.



diciembre 12, 2011

Un cambio antes de amanecer.

これは私があなたのために書く最後のものです。

Justo en este lugar
Fuera de mi ser
he sacado la bala.

noviembre 27, 2011

Algo para mañana.


Para mañana dejaré abierta mi ventana. Sin que nadie se entere, pondré al corriente mis deberes, bajaré por la escalera de las nubes, cambiaré los colores desgastados y subiré al cerro a mirar lo logrado.

La dejaré abierta, así podrán mirar mientras mi ausencia se revierta a las horas sin luz ni puertas. A las horas vacías y llanas de almas planas. De fulminantes días de antes. De antiguo carácter y cimientos pensantes. Dejémonos de mirar el antes y volvámonos al durante. Cierta la parte.

Abierta cual pecho materno, respirando entre sus senos los hombres venideros. Cual costa veraniega, esperando a sus amantes de la cordillera. Como la estación de trenes o del puerto, da igual si llegas cojo o tuerto. Aquí estaré, sin ningún entuerto, puesto que mi puerta se ha cerrado por dentro.


Así, al menos, tengo algo para mañana.

noviembre 05, 2011

Para mi nostalgia.


Si el invierno termina mientras yo sigo aquí escribiéndole, no creeré en tan prodigio hasta despertar deshielado. Qué importa si es de día, de noche o de lluvia. Si es del norte, del sur o de los lados del extremo, si la casa es de cemento o de playa. O roca cordillerana.

Si el papel es gris, blanco o tinto. Si es igual o distinto. Variopinto. Como el pintor, quien aún está sobre la escalera. Si aún mezcla el pan con el rock, la realidad por la nostalgia. La mía, la de todos los días. La que se mira al espejo y ve quien no distingue los colores, aquellos, los pintados mientras mirabas. Mientras mentías la vida. De mí. De ti. De todos.

Y ahora qué, ahora nada. Si ya está todo muy suelto. Las promesas son mentiras de un futuro no resuelto. absuelto el presente sin precedente. Sin comarca ni presidente. Como ente despechado me sigue la nostalgia a todos lados.

Si fuese blanco, pero no. No lo era, nunca lo fue. Aún en lo mismo.

De los cisnes, o las hormigas, de los pintores o de las claras. De la cama. Del lugar sin ama.

Lo cambiaría todo. Las nueces por sardinas, las eses por cortinas. La distancia por rutina y las vacas por cantinas. Para que se pudiese entender, pondría bayas al arder. Alardear. Pondría algunas palabras para rimar y timar. Las cambiaría de lugar. Imitar. Y mi tardía vida sería perdida.

Si nada resulta, me cambiaré a mi mismo, así dejo de caminar en círculo.

noviembre 02, 2011

Algo perdido en el tiempo


¿Qué harás? ¿Podrás volar conmigo y disfrutar de la vista? Caminar por senderos perdidos en el tiempo, restar la importancia a quienes han cambiado de lugar.

¿Qué querías conseguir?

¿Qué será de las mariposas ahora que sé dónde van a morir?
Nada a cambiado, salvo yo.
Es suficiente.

Se separan y juntan antes de morir.

¿Dónde?

En el corazón de quienes las vieron volar, cuando dejan de ser y son otros, siendo lo mismo.

octubre 04, 2011

Sobre lo que siempre quise decirte y preferí callar.



Lo que siempre quise decirte y preferí callar es de tal importancia que a ratos dejo de participar de mi propia capacidad motora. Como un loco, o un tren descarrilado que de lado a lado rebotan los pasajeros más tristes que boleros. Lo callé. De callar, de no decir y guardar, de no averiguar más y sepultar las palabras aún no natas, como la leche, claro que no. En otra vida podría contarte que eres más que del planeta marte, pero eso no cabe ni suena en tu cabeza de avena. No rima ni afina como olla en la tina. No resbala ni salta como huevo con malta.

Es correcto recordar que concuerdo conmigo mismo y los otros mismos de mi persona, que aún prefiero sin decir ni cero sobre lo que siempre quise decirte y preferí callar. De andar por la calle. O de caer, pero mal escrito. O de no querer decir y mentir. De trabar la lengua con las palabras y mostrar los anatemas en vez de los problemas.

Estuve equivocado de tal manera que creí descallar y soltar la idea que pudiese desear. Pero el sobre se trata del tema, no del tema del sobre, ¿me entiendes, Méndez? Que tenga o no tenga sentido poco te servirá para cortar el hilo del papiro, para entender las molestas ideas, hace falta cefalea. Que te duela la cabeza no será pretexto para arruinar la ruina de la rutina, cretina. De Creta y rima. Como Limón, que rima con lima.

Perdón.

Pero no. Gracias por participar.

septiembre 08, 2011

A mi paz-ada vida.

El otro día te vi, claro que sí. Como en mis sueños, con la misma ropa de siempre, pero más linda. En el metro como dos extraños, como siempre lo había recordado. Estabas serena y yo ansioso, hace más de dos años que no nos dirigíamos palabras de los labios. Semanas antes, hablé de ti, como invocando tu presencia en mi vida. Como siempre, siempre he querido estar en la tuya y ser de nosotros mismos. Otra vez.

Otra vez fallé.

Estoy bien. Lo estoy. Como tortuga con caparazón nuevo. Refaccionado y mejorado con alas para volar entre sueños. Entre colores diversos y ferpectos. Tu sabes, la vida no está para quienes no puedan descansar de la suya y sostener entre el tiempo a quienes la de ellos pudieren importar.

Te extraño.

La ilusión de que algún día veas esto, lo leas y algo figure dentro de tus andares. Tantas líneas con tus nombres, tantas ideas camufladas, tantas palabras jugadas para señalarte que jamás he olvidado tu nombre.

Estoy bien, me siento bien. Pero no sé si será suficiente para ti, para que volvamos a ser de los mismos.

agosto 30, 2011

Extraño

Extraño es el tiempo perdido, la bala loca de amargura incansable. El supuesto perfecto de sonido distante. Si, estoy solo para comenzar el viaje restante. Me parece de locura serena, de fragante verbena, sin risa ni pena.

Extraño es quien no olvida, quien de ida se pierde la partida, la inevitable caída.¡ Qué injusta es la vida! Yo de fuera he visto tanto más, me parece de mentira este engaño moribundo, de ser profundo cual objeto desconocido, mal parido. Desaparecido.

Es así. Extraño.

Y mucho.

agosto 15, 2011

Respuesta al anonimato de quien escribe.

Si supiese quién eres, te podría dar las gracias de manera más apropiada por tan acertados versos.

agosto 13, 2011

A veces


A veces, como los niños perdidos de señales paternales, como abrazos de algunos fraternales y desconocidos comensales, a veces. De las trece sería la última de la lista vista y fascista, tortuosa de años perdidos en los anales del abismo mismo. ¿Seré yo el parecido? El mal habido de otras tantas tonteras de peras sin árbol de sombra y corva, con "K".

A veces son instantes dispersos de antes, de momentos sin vuelto y otros sin revuelto. Si no revisaste, un caracol te explica en el camino perdido. Destino sin valor real y zonal, a dar botes por lugares de antaño, como cual aleación de cobre y otro cuyo nombre no evoca razón ni son, menos al sol.

A veces son muchas veces, muchos besos versados, muchos versos sin peña ni dueña. Sin canción ni estrella detrás de la luna en cual ventana sin pluma. Pájaros sin armas del despegue. Tan similares como el caqui de invierno, dispuesto a mostrar sus ramas de frutos sin hojas, sin flores, sin más que sus colores. Ridículo cual mismo. Dejemos el ridi de lado y veámonos lo siguiente.

A veces bromeo con lo que digo, con los higos del nogal, y los de mi otro hogar. A veces son muchas veces ¿ ves que no hablo de eses? De peces sin cardumen compañante, vámonos sin antes pedir perdón por la broma desatada. Mal contada. Sin nada. Para nosotros mismos, claro.

A veces dejo mensajes de sastre. Desastre. El resto, mejor que tampoco.

Entonces no.

julio 24, 2011

Insomnio

Me caigo de revés, del día del ciempiés, acribillando calles de otros lares. Mirando las sábanas aglutinadas del despertar majadero, ni un pestañeo se puede por entero.

No me gustas, insomnio de la vereda del frente. Del río que no es más creciente, del despierto malogrado, malparado, malvado, mal.

El delirio siempre está presente, está candente, maloliente. No es benevolente. Qué quieres del hombre cesante, del sin semblante.

Más te intento entender, más ganas esta batalla inútil, esta discordia fútil. Como fusil dispuesto a matar, ¿Crees que lo podrás lograr? Ilusión sin par, sin comienzo ni final, ya llegará quien logre ordenar mis horas, mis moras y otras noras.

Ahora caigo descalzo, cual niño en rincón protegido, aún sin viento ni tormento, dejaré mis manos de lado y veré si puedo alcanzar mis aposentos.

Ya, chao pescado no más.

junio 19, 2011

Ya volví


Volví a fumar, a drogarme con el humo del despertar marchito. Con la sutileza del cáncer venidero. Volví a viajar por huestes extranjeras, locales y memorizadas de sueños pasados. De simples ecos carraspeados.

Volví a pensar en los cuentos pasados, hechos consumados y otros tantos enarbolados; enraizados. ¿Qué pasará con la esencia distante y lejana de mi espera cotidiana? Volví a creer en los juegos mentales de entes banales, armando pares.

Volví a fumar y me gusta. Me gusta ser libre y hacer o no hacer lo que quiera hacer por hacer y no por deber o querer. Hacer con "h" de hecho y de echó la "h" para el trecho restante y sonante. Pobre triste asonante. Áfona y metáfora de la lista sintáctica y metódica. Mejor dejamos los puntos sobre tu siguiente compañera.

Caí en cuenta que volví. Como me gusta ser, como quiero serlo y no parecerlo. ¿Quedó claro mi parlamento? Mi deslizamiento, mi triste descubrimiento tardío. Del hastío de complacer y dejar de ser el ser quien debiera ser con "s" sin "r" de he. De nuevo el problema de la muda compañera. Dejémoslo ahí.

Aun tengo que sentir. ¿Qué crees que estoy diciendo aquí? Deberías saber que he vuelto, libre y sereno como compañero majadero.

No se puede conquistar con meras palabras ni actos cesantes. Sé que soy un simple hablante de patio mal regado. Adornado y atribulado. Sin rib quiero estar.

Ya volví; no sé cuándo volveré.


junio 06, 2011

よくそく

蝶は どこで 死ぬか

はるかさん の 私人 ですね!

junio 01, 2011

Para mi esperanza


La distancia nunca ha sido un impedimento; la falta de atrevimiento lo es. De eso tenemos para sacudir nuestros cuerpos.

Entonces, tendremos que esperar.

mayo 29, 2011

Sobre mi viaje


Deséenme suerte.

Si no los veo pronto:

buenos días, buenas tardes y muy buenas noches.

mayo 17, 2011

Punta de Tralca


Donde los colchones incómodos no impiden el dormir. El frío no lo ha sido, la soledad no es tal.
Los truenos no mojan, suenan.
El hogar no se extraña. Se llena de arena, te araña.

Aquí es mejor.
y que mañana también.


En Punta de Tralca
se oye tronar
un silencio mortal

mayo 16, 2011

Un simple sueño

Entre sueños fugaces
corrió despierto
horas crepusculares.


mayo 08, 2011

Mi libertad


A ratos no vuelo.

Por las calles corro en mi bicicleta de tapabarros cromados. Me detengo a ratos para cautivarme con los parajes urbanos, los aires malolientes, el espectador del frente. Pedaleo con fuerza moderada, para alcanzar la meta soñada, sin tanta pereza acumulada. Avanzo de tanto en tanto, a tracción sopesada por la pendiente empinada. Por la pendiente eucaliptada, robleada, palmereada. Por la pendiente invertida, corro deprisa, cual caída.

A ratos no corro.

También camino por las calles, con mis zapatillas de años anteriores, con mis bolsillos llenos de manos entumidas, con la cara colorada y gorro de lana de alpaca. A veces tengo un gorro con visera, para cuando mis orejas se sientan templadas. Juego a pisar las hojas de dos en dos, por lugares cuyos nombres redundan con su género próximo. Muy complejo de entender el zigzagueo azaroso.

A ratos no camino.

Por los senderos demostrados, me siento a ratos. Sin mantel, ni mantillo que libere de mi cuerpo cualquier insinuación de suciedad. Mi humanidad reposa en el suelo y ahí se queda, sin consuelo. Con sombra, sin luz, smog o cualesquier otro concepto luminoso. A veces leo en posiciones estáticas, otras prefiero no moverme. Libros y no libros, cuentos de historias consumadas y otras sin cumplir ni terminar.

A ratos hago nada; y soy libre de hacerlo.

mayo 03, 2011

No mariposa.


No eres mariposa de arrullo, tienes su forma, eres capullo.
No me engañarás dos veces, sin esas alas, comida de peces.
No eres agente de ternura, aislada completa, adiós premura.
No más negaciones, salte de mis letras, sin vacilaciones.

Adiós mariposa incompleta, sin quererlo, fuiste profeta.
Adiós mariposa desdeñada, fuiste entera, por tanto amada.
Adiós querida compañera, busca tu historia, en esta era.

Bienvenida realidad sucinta, con lugar propio, encinta.
Bienvenida realidad compleja, busca otro receptor, moraleja.

Una mariposa muerta, que no era, sino de la huerta.



abril 26, 2011

Afuera de la vida


Sólo quiero dormir, entre los sauces despiertos. Escapar hacia mi Punta de Tralca querida, correr por la arena y jugar con mi pena. Llegar a Concepción amante, sentir ese aire de antes, caerse en el teatro, el pasto, los patos.

Quiero despertar en tiempos distintos, de colores variopintos, de caminos sucintos, sin tantos ahíncos. Cansado me siento de mirar los costados pasados, los versos gastados, los gorriones asomados.

Quiero acostarme en las nubes del alba, del otoño sin calva. Vénganse las hojas a mi cuerpo arrullado por las hierbas, escarchado por la mañana incesante, vapuleado por los aires filtrantes.

Sólo quiero caer cual mariposa en su destino, en su tono pristino, de convicciones enarboladas sea la trastienda alada, iré con su difunta camada.

Levantarme entre las tientas nocturnas, bajar por los escollos sin burlas. Enaltecer las escamas al sol, cual Ícaro, caigo sin crisol. Sin razón despertaría la ira de quien me agravia, para renunciar, sin dudar, en su labia.

abril 25, 2011

A mi amigo Gonzalo.

gracias por ese aire, aire, aire, que se vive, vive, vive.


Q.E.P.D.

abril 19, 2011

Sobre la vida del poeta.


Nací poeta, en una casa de poetas, de tradición poética, en un país de poetas con crédula convicción poética de ser poético.

Crecí rodeado de poetas, en un ambiente poético, bajo cielos poéticos, en lagunas y valles plagados de poesía.

Compartí con otros poetas, poetizas y otras bestias poéticas. Divagué la poesía con animales poéticos y seres poetizados.


Morí en un ataúd poético, rodeado de poetas y poetizas, quienes recitaron poesía de mi poética vida en mi patético lecho.

Poéticamente hablando, lo he logrado.

abril 14, 2011

Mi hogar


No es un lugar, tampoco un estruendoso pasar. Es una niña de dulce caminar, de esplendorosas formas y cuantiosas tornas. Quien día a día me tienta a cautivar, por parajes dispuestos a volar.

Es mi hogar, como verbo presente, como caída libre de parapente. Copiosa necesidad del vientre. Del deseo vital y bucal, otro irracional se prende de numerosas fuentes. Cuantiosas ignominias pasadas, ahora simple y llana como quimera malsana.

Es mi frondosa necesidad por asestar mis cansancios recientes , por frotar esas dulces narices pacientes, por malograr la paciente apremiante, sin saber de otroras danzantes. Es mi apogeo de colores imperecederos, de fugaces ánimos verdaderos y otros tantos varaderos.

Mi hogar lo llevo conmigo a todas partes, en mis versos de tripulante, de capitán sin comandante. En el cenit asoleado de recuerdos pasados. En la nubelosa nube nubelada de colores coloridos por pintores aguerridos a la escalera escalerosa de nuevosas formas formadas de hadas aladas y mermadas por la afluente idea del fluir naciente.

No es una casa, un lugar ni un recuerdo. Es una promesa de mi vida.

abril 10, 2011

bajo su reino, entre los aires cayendo, se observa el resplandor creciente de caminos y ojos nacientes. Tú, quien cae sin suelo, vas mirando los colores por entero. Por las villas desterredas, por las sendas erradas y otras trashumadas. Por lo obscuro voy notando, que de calle en calle voy mirando, que de puerta en puerta voy tocando, y de verso en verso voy amando. Te caes esta noche, echando fuerzas al descanso, al frío descalzo, al cielo tan vasto.

marzo 21, 2011

Otra vez Otoño!


Desde hoy me declaro feliz, atento, lúcido. Por las hojas suicidas, los vientos enternecedores y los pájaros cantores. Me declaro feliz por las aguas purificantes y los ríos danzantes.

Me declaro atento a la fecha festiva, al cantor sin salida. Al aguacero de día. Me declaro feliz por estos tres meses triunfantes, por el atardecer flagrante y bosquejos de antes.

Me declaro feliz por el Otoño llegado, atado, amado. Por la compañía pensada, amada, y otras tantas contadas.


Por un tú, que hace rato dice plupluplú.

febrero 14, 2011

Caes descalza.



Ahora duermes, antes dormías. Entre las sábanas fraudulentas. Caías descalza y suspirabas entre líneas de respiración semi silenciosas. Volcabas de tanto en tanto y mirabas, y tratabas de formar palabras con tus fuerzas de otros mundos. Caías descalza y suspirabas entre líneas de respiración silenciosa. A veces dijiste sinsentidos perfectos, copiosas sílabas sin ton ni son. Correcciones posteriores advirtieron un testimonio perdido entre las veces de vueltas primeras. Caías descalza(...)

Nadie podía calzar la visión y disimular el asombro. Eras la primera en ser vista y caías. Otros tantos ruidos perdidos has murmurado sin razón, otros han contemplado esta escena redonda. Siempre caías descalza y suspirabas entre líneas de respiración ruidosa. Entre mis brazos cayendo.

Cuando despiertes te contaré que caías descalza y suspirabas entre sueños silenciosos.

enero 24, 2011

Recuerdos al azar.


Recuerdos de los inciertos faltantes,
de lugares y sentidos de antes.
estertores corruptos,
y otros cuantos eructos.
Sin pasearme por la calle añeja,
descubrí a singular pareja.
Desmembrados los estupores calcados,
el hombre asentía al espectáculo brindado.
En el negro perenne de la noche finita,
conduce al agraciado, la sangre palpita.
El cauce vuelca cual salmón en celo,
se comen las horas, se queda en cero.
La materia cae, chorrea y quiebra.
El viento hiela, cose la hebra.


Recuerdos de tiempos remotos, a veces alocados, a veces difusos. Llenos de detalles contradictorios, capaces de volar la imaginación o esclarecerla. De vivir en momentos distintos, espacios iguales. Ser mejores en tiestos separados. Ser hermanos escogidos y, sin quererlo, extraviados.

¿En dónde estarás tu,
lepidóptera,
al acabar el vuelo?

enero 12, 2011

Para ella.

Sobre la escalera

mira la nube

el pintor de colores.

enero 06, 2011

Lo que pensé esa noche antes de dormir al alba.


Estrellas finitas recorren mis ideas varias. Ahora, cuando yacen perplejas ante la somnolencia matutina, fallezco de afrentas iluminadas y vuelvo a correr entre el alba y el solsticio de otoño. ¿Cuándo volverán, las hojas, a caer?

Camino bajo el sol ¿Cuántas horas tendré que esperar? A veces es distinto. Ahora, igual.

Los peces caminan por estrellas perdidas de compañía ¿Qué sentido, la esperanza, sino de sentir empatía?

Camino bajo el sol, sería la estrella única.
Una única estrella bajo un sol caminante.

A veces, la diferencia entre un perro y un gato son simples kilos de más.
Cambienla por otra ¿Otra? Sí, y de las mismas