septiembre 24, 2012

La Salida


por: Diego González
La poesía es la única salida
a estos tormentos de menta,
oscuros como la noche soleada,
despierta y taciturna como
el lápiz que no uso para contar
que la poesía es la única salida.

No hay puertas de escapada,
ni ventanas bienechoras,
son las comas mal puestas
en los finales de versos mal
contados, las cuales indican
que la poesía es la única salida.


No es queja de oficina ni de oficio,
es plena realidad mutilada por el
orificio que rueda para entintar
la hoja virtual con la que digo
que ni los puntos y seguido
harán de aquí un buen cometido.
Ser paciente, ente despierta, ¿no ves?
La poesía no es una afrenta,
es la única salida a la vida cruenta.

¿Qué viste en ese signo de interrogación?
¿Cuántos de exclamación se necesitan
para que el vecino me escuche?
Admiración dirán algunos otros.
Y yo diré que estoy sentado a la cabeza
de un árbol grande y quejumbroso que
mira a los niños colgarse de sus brazos.

Dime, ¡oh querido árbol!
¿Por qué busco en ti la respuesta
a una pregunta que no responderás,
que no hablarás?
Eres un árbol, uno de pie junto a
los niños que se columpian sin destino.
Los árboles no me hablarán,
porque dejé de hablarles.
Porque solo yo sé que la poesía
es la única entrada de salida..

septiembre 18, 2012

Quinta!

Un día, caminando, me di cuenta lo poco bello de mis versos y me enteré tarde: no soy un poeta de lo hermoso y lo divino, mis letras más se asemejan a lo simple y permitido. A la infinita obviedad de las cosas.  Así que no seguiré buscando a las flores floridas en desiertos llovidos y sutilmente polinizadas por el viento que las acogió entre las brasas incesantes del sol de verano. No.

Mejor digamos que las flores del desiertos son una rareza y que tanto da si aparecen, ya que, como no hay agua, desaparecerán y del mundo se irán y ya sabemos que todos las habrán de olvidar.

Me devuelvo indignado, cuando leas esto quizá ya he regresado. Te habré dicho que te amo y en las noches unas rabias habré pasado.

Hoy es diez y nueve (ciento nueve) de septiembre, uno de los días que más odio en la vida. Junto con el 21 de septiembre y el 25 de abril.

Ya te veré, ya me verás y dirás: es verdad, eres feo como ningún otro feo.


Que quede claro, somos feos, todos. Pero yo más y mejor.

El diez y el ocho en Punta de Tralca (dia cuarto)

Supongo que para este entonces estoy tirándome los pelos, saltándome las palabras y brincando de piedra en piedra para ver si no se me ha escapado algún granito de arena por contar.

Ya no deberían quedar páginas por leer ni vino por tomar. Hoy es 18 de septiembre, el diez y ocho suman ciento ocho. No te vayas a confundir.

Vamos a las fondas! bailemos cueca y comamos hasta la semana pasada! añoremos lo perdido en la nocturna borrachera y cantémosle al albedrío antes que los milicos marchen ridículos.

Yo no sé ni bailar ni cantar. Tampoco zapatear. A veces ni me considero chileno. No me gusta eso de las naciones.

Tampoco las banderas.

Yo quiero un lugar donde me recibas o donde yo pueda recibirte, y no estar preocupado que para este día tengo que colgar un trapo viejo que el resto del año estará perdido.




septiembre 17, 2012

Día tres tristes tigres trigo tragaban en un trigal

Hoy es lunes 17 de septiembre, día en que uno contabiliza el número de curados en las calles, de botellas esparcidas por todas partes, de basura y residuos diversos de carretes previos. Aún queda su buen trecho.

Aún queda tiempo para estirar más las piernas.

Te dejo esto: https://www.youtube.com/watch?v=crF9nm435zQ


Mándale un beso al Tito que es muy tito.

A propósito de espinacas: https://www.youtube.com/watch?v=6MwoMrJn7Zk


Buenos días. Y si, son buenos.

septiembre 16, 2012

Día 2

(En Punta de Tralca, entre El Quisco e Isla Negra, algún día me cansaré de decirlo, cuando ya nadie desconozca este espléndido lugar, el cual es así de espléndido porque no mucha gente lo conoce, ergo, cuando deje de dar la aclaración de dónde queda esto, ya dejará de serlo, ¿se entiende, no?).

Ahora si que aún estoy durmiendo. Dirás que son las doce y que es medio día y blobloblo (mi forma ñoña de decir "etcétera").

Es aquí donde mejor he logrado dormir. Me da sueño por todo y por nada me quedo dormido en cualquier parte. Me dan más ganas de comer, de hacer cosas y de dejarlas para más rato. Sinuosa dicotomía del hacer en el espacio frente al mar que de puro curioso se escucha tronar la ola en la roca.

¿Cuántas preguntas absurdas podría hacerme aquí?
¿Por qué puedo dormir del otro lado, si las camas son menos cómodas?
¿Si no hago mucho, por qué me da más hambre?
¿Si como más, por qué no engordo?
¿Por qué, si trato y trato de anexar una foto a esta entrada, no me resulta? acaso? acaso?

Espero mucho que estés disfrutando mucho estos días de descanso y chilenidá.


brindo por el mar y por la borrachera!
con un tinto en la mano,
brindo por mi compañera
a quien yo más amo.


tiquitiquiti



septiembre 15, 2012

Día 1

Ya estoy en Punta de Tralca (entre El Quisco e Isla Negra). Seguro estoy aún durmiendo, "el viaje fue muy cansador".

Te dejo estas cosas que he pensado.

Todos los sueños son de invierno

 El problema del invierno es la imagen de un otoño muerto. Mis pies tiritando tu ausencia. Secar el asiento de la bicicleta y que el viento de cuenta de mis ojos.

El otoño no está muerto, aún en verano las hojas caen pálidas e inertes al suelo fogoso. La vida comienza en primavera, pero nosotros nos guardamos a hibernar hasta que ella ocurra. Patéticos y simplistas. Monocromáticos los de invierno. La nieve blanca y los árboles grisáceos, los abrigos negros todos y las caras pálidas.

El otoño, la primavera, etcétera. Ya me aburrí de las mismas cuatro leseras de siempre, el mismo orden, las mismas hojas cayendo, floreciendo, fruteciendo, cayendo y lloviendo y callando y muriendo para revivir y sufrir e ir.

Ya no quiero que sea la otra estación. Esta y punto, aquí me quedo. A tu lado, sonriendo.



Cambienla por otra ¿Otra? Sí, y de las mismas